domingo, 31 de julio de 2016

UN PRETEXTO PARA LAS RAZIAS VIKINGAS


¿Habéis oído hablar sobre las andanzas de los vikingos? ¿Sobre la fiereza de sus incursiones, los pillajes?
Os voy a dar una exclusiva: es todo real. Creo que incluso llegaron incluso hasta América, fíjate.
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Nosotros tenemos al Capitán Trueno, y aquí en el vídeo de más arriba lo vemos luchando con Sigrid de Thule...
Ya sabéis de mi predilección por Noruega, los asiduos a este blog, y estos días asistimos a una nueva entrega de los encuentros interculturales que vienen sucediéndose desde hace 19 años, esta vez en mi casa, en mi territorio.
Es un privilegio ser amigo de K. Y ver crecer a sus hijos mezclándose con los míos en el idioma universal, todo un orgullo.
Nuestros encuentros son dichosos y divertidos, aunque esta vez había el riesgo de que A., con casi 2 años, podría ser un bicho de mucho cuidado; mi hijo, L., tan desafiante que no ha habido más remedio que empezar a poner límites en su educación, no le iba a ir a la zaga: mi casa iba a ser un jodido campo de batalla, y así ha acabado siendo. Días después, todavía hoy he encontrado una foto enmarcada mía y de Laura ¡en una rejilla detrás de un calefactor! en la buhardilla, manchas en el suelo de la escalera de la entrada que no se van con ningún producto de limpieza conocido y la sensación de que una horda de salvajes vikingos había arrasado con todo cuanto había hallado a su paso...
No, en serio, les adoro. Escribo esto con una gran sonrisa. Me gusta ese caos tan auténtico que les caracteriza -y les produce 0 preocupaciones por cierto- y me siguen sorprendiendo esas 'pequeñas diferencias' culturales respecto a nosotros; el tema horarios, por ejemplo, incluso con la chicharra que ha caído estos días. Ese 'dejar hacer, dejar pasar' me tiene alucinado, porque luego cuando hay que ponerse en plan poli malo lo hacen sin dudar ni un segundo.
Verles juntos de aquí 10 o 12 años en plena adolescencia (en 2026 o 2027, hay que joderse), relacionándose, siendo amigos, me emociona. Porque sus padres establecieron un vínculo que se perpetua en el tiempo y la distancia y, al final, la vida no es mucho más que eso. K. y yo lo sabemos y por eso precisamente seguimos ahí, en la brecha. Aunque luego esté pendiente de sus meetings por roaming (¿cómo lo harían antes?) para 'tratar unos precios' cuando nuestras preocupaciones son mucho más terrenales y haya esos momentos en que se pueda compartir un silencio que no huela a desaire o a una convicción excluyente sobre la familia y la existencia en general.

miércoles, 20 de julio de 2016

EL (FALSO) VERANO DE DOS MIL DIECISÉIS

El falso verano de dos mil dieciséis, marcado por otro ingreso no deseado, la ausencia del ser querido y los viajes a los mares meridionales; la boda, la masia de septiembre y mi pequeño bimbo, lo recordaré por ser más largo de lo esperado.
Está siendo un verano atípico, este. Tampoco he visto a Albert, muy poco a mis amigos y la necesidad loca de antaño que muta por momentos. Ésta va a ser la cuarta semana de calor intensa sin apenas lluvia. Como dije, me recuerda mucho a aquel verano de dos mil seis -hace ya diez años-, con nuestro bañito en Villasimius el 31 de octubre.
Un verano, este de dos mil dieciséis, sin viaje. Perdón, creo que ya lo he dicho. Una auténtica locura, en este año de locos valga la redundancia, más si cabe por no poder recuperar ni un centavo al final del día. En realidad, desde luego, sí que pensamos en el jodido dinero. De hecho veo el sobre y la mano extendida, unas breves palabras al oído tipo una ayudita para empezar, que Dios os bendiga. Y por qué no.
Mi hijo L. empieza a desobedecer sin ningún pudor. Me desafía a situarme en la disyuntiva de tener que elegir qué clase de padre quiero ser. Si descarto ser el padre-amigo, que es lo más probable, ¿cuán cerca me hallo de convertirme en un padre como el que yo tuve? Necesito unas vacaciones de L., desintoxicarme de él. O me desapego o me la pego, como me dijo mi vecino.
Tengo calor. Todavía toso. El puto antibiótico me va a reventar por dentro. Vuelvo el 29 y, francamente, ya que no nos vamos, pues no me importa currar. Un verano a base de escapadas puntuales a la playa y la piscina, a base de poco aire nocturno mientras me despido siempre entre el OVNI que sigue desplazándose hacia el oeste -basura espacial, leí- y los chavales que juegan en la plaza hasta tarde, no es un real summer: son unas fakelidays, carajo; en espera de los noruegos, con el tembleque de tener que rebuscar nuestro mejor inglés entre los restos del reciclaje, ya habremos cumplido con la primera parte con creces. Agosto ya no es lo mismo, nunca es lo mismo.
Este falso verano, marcado por una aceleración histórica evidente, más largo de lo esperado, sufrimos esta canícula sin apenas salir de casa y conectados a la red, calculando ese día de septiembre para escribir unos votos. Qué cojones... ¿y por qué no? Ya veréis mi traje. Una auténtica locura.

lunes, 11 de julio de 2016

HABLEMOS DEL CALOR Y DE LA PUTA AGUA HELADA

Llegó el verano y nos fuimos a casa como predijimos. Supongo que el ganador saldrá del Francia-Alemania, al menos eso espero.
Pero hablemos del calor y de Richard Ford. En un año sin largas estancias fuera, el año más caluroso de los últimos diez -aniversario del erasmus-, ya nos hemos escapado un par de días a la piscina y un fin de semana largo a la playa. El agua está helada, no acabo de entender por qué, si es siempre por estas fechas que nos perdemos por nuestros mares. Puede que, al perder ese espíritu viajero este año, percibamos la realidad de una manera tan poco conocida que sorprenda; qué julio tan extraño, caray.
O cómo explicar mi constipado. Mi habitual tos de dos semanas -llevo una larga- en plena ola de calor. El aire del coche, el ventilador del llit dels papis mientras nos dejamos el sudor grunchando como locos, el puto mecánico (pareja de la prima de mi mujer) y, pese a ser buena gente, sus sablazos. Mi no-traje, con agosto cerrado y la novia ya vestida... Como para no agrietarséme el carácter.
El 4 celebramos el cumple de mi amigo Ace en Sant Pol de Mar. Está cerca, ninguno lo conocíamos; bueno, yo estuve con Gnöit como más de diez años atrás pero no me acordaba de nada, y queríamos comernos una paellita al lado del mar. Al no encontrar precios razonables -invitaba yo-, nos pedimos una ración de patatas fritas con algo de carne para engañar al estómago y seguir un rato más. Tengo muchos gastos, le dije, pobre paladar. A las cuatro y media ya pensaba en las tareas propias del ocaso y se me quemaba el rancho.
Luego están las pérdidas, una de las cuales es recuperable en cierto grado. Y eso me pone mucho menos triste que hace una semana, cuando no podía dejar de llorar a mares. No sé si he llorado tanto por alguien antes.
La verdad es que no me importaría ser americano. Leo a Richard Ford con la disimulada envidia de una vida como la de Albert, que serviría para llenar un buen par de guiones ahora que se ha acabado la sexta temporada de Juego de Tronos y no consigo comunicarme fluidamente con él. Leo todos esos nombres de calles, costumbres absurdas y el jodido way of life relacionado con la monotonía universal, con la falta de objetivos vitales y la aceptación-negación del propio ser y me digo... joder, ese soy yo.
Es raro que me refleje en dos norteamericanos y un noruego a mis treinta y seis años. Pero me llegan, Carver y Ford y Knausgård. Aunque de verdad, me gustaría dejar de estar constipado y gozar de este mes de julio sin curro ni viajes, de este calor asfixiante y del agua, que sigue fría de cojones pero me recuerda que este año es atípico, boda incluida. Y que no gane Portugal, gracias.

lunes, 27 de junio de 2016

LA PÉRDIDA

Perdónanos, gordita. 
Estoy en deuda con la naturaleza.
DEP CPC

domingo, 26 de junio de 2016

BEBERTE LA MAR

Una de las cosas que nunca te he dicho es cómo amo el mar. Perdón, la mar.
Incluso si es de noche, como hoy, y he bebido hasta quedarme solo, como ahora, y la percibo allá en el fondo no tan lejos desde el terrao de mis amigos aquí en la Costa Daurada.
Oteo sus luces pálidas que no consigo enfocar, huelo el aroma a arena y sal que lo inunda todo dándole una pátina de circunstancialidad y aventura a estos días de verano.
Porque todo es posible en la mar, hasta desaparecer si hace falta. Es San Juan y todavía arden los corazones de la noche más corta y el aire transporta partículas físicas que al entrar en contacto con mis desnudos pies me sorprenden dejando el rastro tiznado de una pólvora que muy cara no debe ser.
Aunque no te veo, sé que estás ahí. Puedo sentirte. Me llega el rumor del oleaje como una necesitada letanía para mis viejos oídos. Cuánto te he echado de menos, mi amor. Porque el que no tiene la mar cerca, ya sea a una hora en coche o a cinco minutos andando si tienes que hacer el esfuerzo, anhela el tesoro de no tenerla más que otra cosa. Porque la mar es amar, es placer, es dolor... y es silencio roto en estos lares poco nostálgicos por el puto tren de cercanías...
La mar es querer vivir, es la llama que está encima nuestro, un grito imperceptible que reclama obediencia y humildad desde el secreto de los cofres perdidos que reclaman su porción de legitimidad en una esquina, de la misma manera que mis retoños y mi futura esposa descansan sabedores de que son amados mientras escribo como yo siento la mar en estos momentos aquí, sentado, entre mi copa y mi soledad que me produce la mar, mi debilidad.

miércoles, 22 de junio de 2016

EURO'16: ANCORA LORO!

El lunes nos enfrentamos a Italia en octavos de final de la Eurocopa. Ancora loro, todavía ellos.
Nuestra historia de amor viene de lejos, concretamente desde el codazo del hijoputa de Tassotti a Luis Enrique en USA'94. Costó quitarnos esa espina nada más y nada menos que 14 años. Y sufriendo, ya que tuvimos que esperar a los penaltis para batirles. Entonces, un imberbe Fàbregas que hoy lleva el acento cerrado en la zamarra y lidia con las voces que reclaman su puesto en el once, engañó al mejor portero del mundo en el último y decisivo penal de cuartos de la Euro'08. Y a partir de ahí empezó nuestra historia de amor con gli italiani del cazz... y con los grandes torneos (hasta la infamia de Brasil'14), ganando dos Euros y un Mundial e imponiendo el tiqui-taca dappertutto, allende los mares. 
Sin embargo, nada es para siempre, y menos en deporte (que le pregunten a chef Curry que se veía ganando el segundo anillo seguido); la competición hace que tengas que ir renovándote si quieres sobrevivir, aunque la mayoría de las veces se aprende a base de hostias -como nosotros en Brasil-, que es lo que te hace reaccionar. La cuestión, aquí, llegados a este punto, es si la Roja está en ese impasse, si hemos completado esa necesaria transición. Ya dije en mi anterior post que creía que nos habíamos quedado a medias, al ver la lista, y que no daba un duro por llegar lejos. Los dos primeros partidos demostramos ganas de enterrar el desastre del Mundial siendo fieles a nuestro estilo, pero ayer los croatas nos dieron bien pal pelo en una segunda parte para olvidar...
Vayamos por partes: 
1.- Ya estábamos clasificados, y si jugaron con el freno de mano echado? Es cierto que los cruces como segundos son mucho más chungos pero puede que el inconsciente nos jugara una mala pasada.
2.- Del Bosque repitió alineación. Aunque sea una competición corta, el equipo lo notó. Con 4 o 5 cambios hubiera bastado (Bellerín, Koke, Aduriz, San José por Juanfran, Fàbregas, Nolito y Ramos). Para que traer 23 si no?
3.- El doble pivote. Está claro que a Del Bosque le gustaría no dejar siempre solo a Busquets. Bruno Soriano es bueno pero no sabe vascular. Es demasiado medio-medio y sufre cuando tiene que caer a banda. Apuesto por Koke para dar más consistencia ahí.
4.- Temas Fàbregas y Nolito. Cesc está corriendo mucho pero no aporta nada excepto por la asistencia de ayer. Koke, como decía, abarca más campo y podría ser el encargado de chutar faltas y córners, lo veo. En cuanto a Nolito, ha empezado bien por el tipo de jugador tan raro que es: se ofrece, combina bien, intenta encarar, tiene pase, calidad y gol... Una mezcla entre Villa y Onésimo. No obstante, le veo nervioso. Le quema el balón, parece cansado... Apostaría por tirar a banda a Morata y hacer entrar a Aduriz a pegarse con la defensa de la Juve y a esperar que cace alguna, aunque Morata está tocado (3 goles ya) y no sé si sería buena idea ponerse ahí a luchar con un Candreva al que Alba va a tener que secar sí o sí si no queremos problemas...
5.- Italia. La Azzurra suele jugar con 5 centrales con carrileros fonderos que habrá que parar, como decía. Llenan el medio campo con jornaleros como Parolo, De Rossi, Motta o Giaccherini por la banda ante la ausencia de los cracks Veratti y Marchisio. Arriba tienen un tocho como Pellè, un Luca Toni, y la incógnita Eder. El banquillo tiene alternativas que me encantan y que pueden ser armas importantes: calidad en Bernardeschi, Insigne e il Faraone El Shaarawy.
6.- Italia (2). La Italia dei coglioni. Son todo voluntad, arrojo, fuerza, ganas... sobre todo tras las bajas, que le han restado calidad. Y Conte, que me parece un técnico brutal, todo un estratega. Y las ganas que nos tienen tras la desfeta de la Euro de 2012 y el 0-4 que les metimos en la final...
Va a ser duro, vamos a ver cómo contrarrestamos todo esto el lunes. Aunque siga viéndolo jodido (le sumo la mierda extra deportiva sobre el portero o las declaraciones inoportunas de Pedro, que no auguran nada bueno), hay que creer en los campeones, se lo han ganado. Con nuestro estilo y algo de consistencia y con un Morata enchufado que intentará liarla ante sus ex compañeros, sé que podemos. Y no menospreciemos a esta Italia que aparentemente nos tiene miedo (nos lo hemos ganado), que sono ancora loro...





lunes, 13 de junio de 2016

EURO'16: NOS VAMOS A PIQUE

Mañana debutamos en Toulouse contra la República Checa en la Eurocopa de fútbol, título que defendemos desde 2008, año en que rompimos un histórico gafe de cuarenta años.
Voy a ser claro: nos hundimos. No hay nada que me haga pensar que hemos superado la debacle de Brasil'14. Empezando por la lista de 23, enumero jugadores que sobran y sus sustitutos: Azpilicueta, Bartra, Fàbregas, Pedro, Casillas y San José; Albiol, Denis, Saúl, Callejón y Williams (el tercer portero me da igual). Tema Casillas: su tiempo ya pasó. Es el mejor portero de la historia de España, pero ya no. Punto.
Digo que nos hundimos porque Del Bosque no ha hecho la revolución que tocaba, ya que ha respetado jerarquías y servicios prestados en demasía. Y eso que es el entrenador más laureado de nuestra historia, pero su tiempo también pasó. 
Es una evidencia muy dolorosa, la del paso del tiempo, y la Roja está en ese periodo intermediario, indefinido, en una transición que podría haber sido menos dolorosa con un equipo joven y completamente renovado.
Va a ser un torneo muy físico y con pocas diferencias en el marcador, por lo que estamos viendo. Los equipos se defienden con uñas y dientes y hasta la selección más débil está hiper trabajada tácticamente. Y ahí nosotros sufrimos, al intentar abrir la lata. Todavía no hemos sido capaces de encontrar alternativas al fin del tiqui-taca, a este regreso al catenaccio más bizarro.
Al primer cruce caemos. Dicho esto, por nombres y pese a la poco satisfactoria lista, somos los mejores. Por eso me joroba y me va a jorobar aún más hacer la crónica de una muerte anunciada. Un poco como al Barça de Pep y siguientes: 80% de posesión y 0 ocasiones de gol. Y Busquets sufriendo.
Mañana empezamos. Voy con el freno de mano echado, no puedo negarlo; además, con esos comentaristas/periodistas/forofos de Mediaset dan ganas de pinchar los partidos por internet y enviarlos al carajo pero bien... 
Mis favoritos para ganar la Euro: Francia, Alemania y Bélgica. Sin embargo, eso no quiere decir que no anime a mi selección porque, si empezamos bien, ojito, que somos los actuales campeones y merecemos estar en la terna por méritos propios.
Como me gustan estos grandes campeonatos...